Madrid ya no es lo que era con respecto al cante jondo, bien es cierto que sigue vendiendo, pero por sus tablaos ya no pasan toda esa pléyade de artistas de primera categoría que los colmaban hasta los años 90. La actividad flamenca de la capital está más destinada al turismo y a otro tipo de públicos. Sólo hace falta ver la programación de algunos de sus tablaos y las "tarifas" que varían entre 45 y 120 euros. Casi resulta más barato ir al teatro a ver a una primera figura que ir a ver al cuadro flamenco de uno de estos tablaos.
Por suerte para los buenos aficionaos, este mes echa a rodar en la capital una de las iniciativas más interesantes relacionadas con el cante jondo y su difusión. Un grupo de aficionaos con amplia experiencia en proyectos relacionados con el flamenco han decidido asociarse para ofrecer una de las programaciones más serias de la escena madrileña. Se trata del Círculo Flamenco de Madrid, una asociación cuyos miembros tienen unas inquietudes comunes, y un gusto especial por el buen cante, ese cante quizás de minorías, pero al fin y al cabo cante de verdad, porque no olvidemos que el flamenco en su sentido más estricto es un arte minoritario.
Su programación consta de dos actividades mensuales, una dedicada al cante por derecho, con recitales de primera categoría, y la otra dedicada a la difusión y aprendizaje del arte que aman, donde se presentarán libros, habrá charlas, coloquios y pequeñas sesiones de estudio. El lugar donde se desarrolla la actividad del Círculo es el tablao Las Tablas, en la céntrica Plaza de España.
El CFM parte con cerca de 40 aficionaos asociados y con un organigrama donde Carlos Martín Ballester es el presidente, Alberto Martínez es el vicepresidente y Manuel Atienza el tesorero. Una de las premisas que han querido dejar claro es su jerarquía horizontal, donde todos los miembros tienen el mismo peso a la hora de proponer, alejando de esta forma la idea de que la directiva es la que toma las decisiones a su antojo. Las cuotas son de 40 euros al mes y 30 para menores de 35 años. Un aumento progresivo de asociados supondría una disminución en la cuota mensual, que por otro lado, con los artistas que se manejan es un precio razonable. Además el asociado cuenta con una serie de beneficios, como precios económicos en Las Tablas, descuentos en otros locales de Madrid y material audiovisual (CD y DVD) de primera calidad de cada actuación.
Parece pues, que estamos ante una gran propuesta y una gran alternativa al trillado tablao madrileño con precios desorbitados. Sin duda, es una gran oportunidad para los amantes del arte jondo de disfrutar muy de cerca de todos sus entresijos.
Programación hasta diciembre de 2013:
Para los aficionados de verdad, una sugerencia: Dolores Agujetas está en un momento impresionante. Acuérdense de ella.
ResponderEliminar